Nacida en Bucaramanga. La fotografía siempre ha estado presente en mí desde que me involucré en el mundo del arte. La necesidad de salirme de los parámetros establecidos, me llevó a experimentar, a probar y superarme con cada toma. La luz tenue o su ausencia son las pautas que marcan mi trabajo. Intento sacar de esa primera imagen el último suspiro, alejarme del original y producir otra imagen, otro ser, etéreo, sutil, pero terrenal en lo extraño e inusitado. La imagen sale así de la cámara. Todo sucede en la toma. Cuando obturo, está casi todo dicho. Correcciones en el editor para pasar de color a blanco y negro o a una escala de color muy sutil. Nada más. Siempre estoy explorando otras maneras de producir mis imágenes, reinventándome, mirando lo que otros hacen. Creo que, con el tiempo, lograré que la imagen se deteriore más para dar paso a una nueva imagen sin rastros de su origen. Quiero que mis imágenes mantengan un carácter efímero en varios sentidos. Por un lado, que no pierdan la naturaleza de la fotografía que capta un instante y, por el otro, que, con el paso del tiempo, vayan perdiendo su materialidad. Quiero que sea más rápido ese deterioro al imprimirlas en un material que se adhiere directamente a una superficie (pared, piso, techo) y que, al acabar el tiempo de la muestra, se desechan porque han sido borradas por los pasos de las personas o porque no se pueden recuperar ya que, al despegarse de la pared, se dañan. Al postear las imágenes en la web, cierro el ciclo, me desprendo de ellas y permito que sean de todos. Regresan a mí, pretenciosas, porque han sido publicadas en otras páginas y vista por muchas, muchas personas en todo el mundo.